La experiencia fue maravillosa, disfrutamos de un entorno impresionante rodeado de naturaleza. Las habitaciones eran cómodas y bien equipadas, perfectas para relajarnos después de un día de exploración. Además, el desayuno estaba lleno de productos frescos y deliciosos, superando nuestras expectativas. apreciamos el área de alimentación para aves en el jardín, que atraía a ardillas rojas y hacía la estancia aún más especial.

La conexión a internet fue un poco inestable en ciertos momentos.

Linda decoración escocesa, entorno natural maravilloso, comodidades en las habitaciones

La ubicación es un poco remota, lo que puede ser un inconveniente. Las habitaciones algunas veces pequeñas y el espacio del baño podría ser incómodo durante la estancia!!! La conectividad de internet es lenta durante las horas pico, lo que es frustrante!!!

Desayuno que enamora

El desayuno fue simplemente excepcional, con ingredientes frescos y locales. Cada mañana nos sorprendía el canto de los pájaros mientras disfrutábamos de una taza de café. Sin duda, el toque personal de John hizo que nuestra estancia fuera memorable.

La habitación era un poco pequeña, lo que puede incomodar a quienes buscan más espacio. Aunque la limpieza era impecable, noté algunas telarañas en las esquinas, lo que me hizo sentir que podían mejorar en ese aspecto.

La experiencia fue maravillosa. Disfrutamos de paseos en familia y de increíbles vistas a las montañas. El desayuno era contundente, y John fue genial al ofrecernos productos frescos. Las habitaciones eran cómodas, perfectas para relajarnos luego de explorar la zona.

Mi mujer dice que podrían mejorar el tema de los mosquitos en las esquinas.

Desayuno excepcional con ingredientes frescos y locales.

Ideal para disfrutar en familia

La atención al detalle fue impresionante, desde las flores frescas en la habitación hasta los batas de felpa que me hicieron sentir como en casa. Además, el desayuno fue gigantesco y delicioso, mejor que cualquier otro donde haya estado. La manera en que nuestro anfitrión John se preocupó por nuestras cosas mojadas, llevándolas al cuarto de calderas para que se secaran, fue un toque increíble.

No fue barato, pero aún así aceptable.

La estancia fue muy agradable. La casa estaba bien cuidada y todo era cómodo, desde las camas hasta el salón. La cocina estaba excelente, tenías todo lo necesario. El desayuno superó nuestras expectativas, con opciones deliciosas y abundantes. El trato del personal fue ejemplar, siempre dispuestos a ayudar.

La conexión a Internet fue un poco inestable.

la casita era acogedora y el desayuno ofrecía opciones frescas y abundantes. mis experiencias anteriores en crianlarich no eran tan memorables hasta que probé este encantador sitio.

culpa a los mosquitos por incomodar.

La habitación era un poco pequeña y le faltaba un poco de ambientación, pero estaba bien cuidada y muy limpia. Tenía bonitas vistas al exterior y el sonido del riachuelo le daba un toque especial. La cama muy cómoda, así que pude descansar bien. Lo único malo fue que había bastantes mosquitos en las esquinas. El desayuno fue un gran punto a favor, abundante y delicioso.

la calidez y atención de john convierten cada desayuno en un festín memorable servido con flores frescas

Inverardran House Bed&Breakfast es simplemente increíble! Desde la llegada, te hacen sentir como en casa. John, el anfitrión, es tan amable y servicial. El desayuno es excepcional, lleno de productos frescos y deliciosos, ¡cada bocado es un placer! Las vistas son impresionantes y eres recibido por la amable fauna local. La habitación es cómoda y bien equipada. Sin duda, es un lugar donde uno puede relajarse y disfrutar. ¡Volveré pronto!

Me alojé en la casita, un espacio perfecto para grupos. Limpieza impecable, comodidad total y un desayuno que te deja satisfecho. Lo único, algunas telarañas, pero nada que arruine la experiencia. Ideal para amantes de la naturaleza y buen comer.

Solo una opción adecuada para ver la zona en Crianlarich con muy buena relación calidad-precio. El desayuno era abundante y delicioso, lo que hizo la mañana más agradable. Si se puede, pide una habitación en la parte trasera para evitar el ruido del pub de enfrente.

La casita tenía todo lo que uno podría necesitar, desde una lavadora hasta una nevera, lo que hizo que nuestra estancia fuera súper cómoda, y el desayuno realmente se llevó la palma, con opciones frescas y abundantes. Me encantó relajarme en el jardín mientras veía a las ardillas jugar y también disfruté de un momento de tranquilidad en la sala de estar. Solo noté un par de telarañas en esquinas, pero eso no arruino la experiencia en absoluto. ¡Recomiendo llevar repelente de mosquitos para estar preparado! 😊